jueves, 30 de diciembre de 2010

Sabes que tu trabajo te absorbe...

Cuando hasta sueñas con él...

Me encuentro en una neblinosa y onírica tienda; un hombre de negocios - con camisa arrugada y cara de no haber dormido en dos días - se dirige a mi compañero, que tiene cabeza de pollo (curiosamente, lo que me llama la atención en el sueño es que no lleve la plaquita con el nombre).

- Ya hemos recibido el informe del servicio técnico sobre su Ifone, señor. - Dice mi compañero Carapollo
- ¡Por fin! Dígame, por favor... ¡Estoy preocupadísimo!
- Nos han comunicado lo que ya teníamos: la única forma de arreglárselo será sacándoselo del recto...
- ¡Dios santo! ¿Y me costará mucho? - Gime el hombre a punto de llorar
- ¡Nada, por supuesto! La introducción anal queda totalmente cubierta por la garantía Appie

Los dos rostros me sonríen, y el hombre de negocios comienza a desabrocharse los pantalones. Yo - dándome cuenta ahora mismo que estoy en bata de hospital, enseñando el culo - corro despavorido a la oscura trastienda, en cuyas tinieblas mora el Capitán Howdy.

Aquí se acaba la pesadilla, el resto de la noche he soñado pacíficamente con el exorcista.

2 comentarios:

  1. Sin duda tienes una vida interior MUY rica... quizas demasiado XD

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  2. Un piropo viniendo de usted, caballero.

    ¡Disfruta lo que queda de año!

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