martes, 28 de abril de 2015

Ejercicios de Narrativa Subi-du-du-a. Descripciones INdirectas

¡Buenos dias a todo el mundo!

Hoy me toca el segundo ejercicio de narrativa. Las descripciones indirectas. estas son aquellas en las que se describe al perosnaje mediante un aspecto de el, muchas veces filtrado por la percepción del narrador.

Son las mas usadas en la literatura moderna, que se centra mucho mas en las impresiones, y me parecen mas entretenidas. A ver que tal me va.

DESCRIPCIONES INDIRECTAS

1. Hacer una descripción indirecta, en 10-20 lineas, de una mujer burguesa, antigua alumna de un colegio de monjas, por su voz.

Escuché la voz de La Falque desde las escaleras, su sonido, profundo y claro, se oía por todo la planta baja. Aunque no entendí lo que decía, supuse que estaba contando alguna anécdota que le había sucedido en la capital, pues siempre usaba ese todo solemne, como quien declama poesía, para que nadie se atreviese a interrumpirla.

No entré inmediatamente en el saloncito de té, sino que me quedé escuchando escondido entre las cortinillas. La dama proseguía hablando de su viaje por la villa con palabras tan bellas y elocuentes  que mis primas escuchaban embobadas como si les hablase de Paris en primavera o Venecia en Carnaval.


Y no me extrañaba. Yo mismo había acabado enamorado de la voz de La Falque. Cruzar dos palabras con ella bastaba para transformar a nuestra simpática y regordeta vecina en una impresionante dama de corte, sacada de alguna ópera.


Cuando era más pequeño, durante las largas ausencias de mis padres, ella cruzaba muchos días a nuestra casa para cuidarme y leerme los libros que ella leyó a mi edad en el internado. La verdad es que de niño nunca tuve mucho interés en aquellas obras -El sí de las niñas, La Regenta...- pero era tal la pasión con la que leía que me pasaba las horas muertas escuchándola.



EJEMPLO PARA COMPARAR: Esther Tusquets. El mismo mar de todos los veranos. Página 36.


Opinión: La autora cumple muchísimo mas que yo con lo marcado. Se basa únicamente en la voz para retratar al personaje, sobreentendiendo la educación en el colegio de monjas por el estilo ligeramente pedante de quien habla. Mejor que yo, desde luego, pero me gusta más la mía en este caso.



2. Hacer una descripción indirecta, en 10-20 lineas,de una mujer bella, enfermiza, muy religiosa, por sus manos.

La recuperación fue lenta y dolorosa. De aquellos días -en los que aún no sabía si recuperaría la vista- recuerdo la angustia, no tanto de verme sumido en las tinieblas, sino de la soledad que llegué a sentir en aquel pabellón lleno de heridos.

Normalmente, un médico nos visitaba dos veces al día y murmuraba a sus compañeros nuestro estado. Las enfermeras eran las que más se preocupaban por nosotros, inyectando morfina y medicinas, cambiando vendajes y, cuando las había, poniéndonos sábanas limpias.


Uno de estos días apareció mi ángel. Lo noté cuando, al cambiarme las vendas de la cabeza  sentí, rozándome la piel, un tacto grácil y cuidadoso en lugar del fuerte y cansado al que nos habituaban las enfermeras.


Sus dedos, suaves y frescos, bailaban sobre mis heridas aliviando el dolor mejor que la morfina. En ocasiones los notaba detenerse curiosos ante una cicatriz, o posarse piadosos sobre un vendaje recién puesto.


Di gracias al cielo cuando la muchacha volvió los siguientes días. Supuse que sería una de las jóvenes voluntarias de la cruz roja e intenté chapurrear un par de palabras en italiano, pero no obtuve más respuesta que una caricia en los labios y un suave chistido.


Aunque no distinguía el día de la noche, las visitas de la joven se convirtieron en mi orden de vida. El alba llegaba con su tacto y la noche caía cuando la oía alejarse por el pabellón.


Cuando al fin pude mover los brazos, aproveché un momento en el que me estaba lavando el torso para acariciarle las manos. Se asustó y dio un pequeño respingo, pero al fin rio –¡una risa clara, tan alejada de aquella guerra!- y entrelazó sus manos con las mías, comprendiendo que era mi única forma de verla.

Su piel era fina y delicada, marcándose cada pequeña vena por debajo. En los nudillos se notaban las marcas de los sabañones que este maldito desierto le había dejado. Aunque note su tacto grácil, se percibía el pulso decidido de una mujer habituada a luchar con la enfermedad, quizás enfermera, quizás enferma, quizás ambas.


Ella me soltó riendo en su idioma que, aunque no comprendí, me sonó suave y cantarín. Con el gesto debí caerle en gracia, porque desde entonces me visitó más a menudo. Incluso una vez me despertó su suave murmullo junto a mi catre. Tanteé la oscuridad, buscándola a mi lado, y encontré sus manitas juntas, pasando las cuentas de un pequeño rosario.


Ese día decidí que, si salía vivo de allí, me habría de casar con la muchacha de las manos de seda.


EJEMPLO PARA COMPARAR: Ramón del Valle-Inclán. <>. Jardín Umbrío.

Opinión: ¿Sutil?¿Has dicho sutil? Yo no, desde luego. Igual que en el ejercicio anterior, parezco incapaz de describir un personaje sin hacer un zoom salvaje ni empezar a contar nada.

Ramón del Valle-Inclán retrata una mujer en dos o tres detalles, no sólo describiendo las manos (una tullida y la otra delicada), sino que tambien usa gestos (caricias, la señal de la cruz) y referencias (torso de madonna) para generar un ambiente propio. Y lo hace sin cansar ni nada.

OPINION FINAL: Sigo lejos, muy lejos. Sin embargo comienzo a percibir que mi estilo es bastante atropellado. No se si eso es necesariamente malo, pero debería ser capaz de dominarlo para evitar entrar en una narración demasiado desordenada.

No obstante, estoy agradeciendo estos ejercicios. Tanto por obligarme a escribir como por exigirme inventar las situaciones. no se si mejoraré mucho, pero estoy notandome menos oxidado día a día.

viernes, 24 de abril de 2015

Ejercicios de Narrativa Subi-du-du-a. Descripciones directas.

Como algunos sabreis, hace unos días gané el XIV concurso de relatos de Torrero con "Lavando Bragas". No os lo pongo aqui porque el concurso exige que ellos tengan los derechos de propiedad y uso de la obra durante tres años, lo siento, pero casi seguro que ellos sacan algun recopilatorio con lo presentado.

El caso es que me ha animado bastante, y me he decidido a trabajar un poco mas el escribir. Leo bastante mas (aún estoy lejos de las "tres horas al dia" a las que invita King, el curro se come bastante), y voy trabajando mi narrativa.

Precisamente por esto último, voy haciendo ejercicios que me van planteando distintas situaciones que narrar, y os los cuelgo aqui para que me podais dar opiniones, tomatazos y "sincos de taringa, grasias de hantebraso".

Todos ellos se componen de un enunciado -lo que tengo que narrar-, un ejemplo -de un autor famoso que hizo eso mismo- y una obresvacion directa mía lloriqueando cuan Rodolfo sobre el piano de los teleñecos.

Aqui va el primero


DESCRIPCIONES DIRECTAS


1. Hacer una descripción directa (de 15 a 25 líneas) de un hombre guapo, egoísta y vanidoso, viudo y padre de cinco hijos.

Todas las mujeres en el pueblo suspiraban por las atenciones del barón De Fill. Era este un hombre alto, apuesto y bien formado que no peinaba todavía ninguna cana en su cabello negro y sedoso.

Se mantenía en forma a base de continuas partidas de caza en las que a veces pasaba días enteros, pues para él era impensable volver a casa si no era con espléndidas piezas de las que presumir. A pesar de esto no tenía las manos encallecidas, como las de otros cazadores, y nunca se le veía tan sucio de barro como sus compañeros.

Solía frecuentar todas las fiestas de sociedad en las villas cercanas,  donde siempre rondaba a las jóvenes de buen ver y a las herederas viudas. Él mismo había enviudado ya dos veces de mujeres importantes, heredando de ambas tierras, títulos, fortunas y cinco hijos.

A los pequeños los educaba el servicio durante las largas ausencias del barón; este, por su parte, lo único que les exigía a sus hijos era no dar mucho mal mientras estaba en casa y que se comportasen cuando tenía fiestas o invitados. Era padre sólo para las grandes ocasiones, aquellas donde pudiese impresionar con su honda preocupación o donde pareciera un impresionante cabeza de familia.

EJEMPLO PARA COMPARAR: Pío baroja. El árbol de la ciencia. Primera parte, capítulo 3.

Opinión: Pío baroja consigue dar una descripción del personaje que comienza con la opinión de su hija y acaba retratándonos a "Don Pedro Hurtado" de una manera bastante extensa y entretenida. El personaje queda mucho mejor descrito que mi "Barón de Fill"


2. Hacer una descripción directa (de 15 a 25 líneas) de una mujer vieja, gorda, pobre, que ha tenido una vida muy difícil.

Cuando Adela colgó el teléfono tenía los ojos húmedos. Sabía que aquella había sido la última conversación que tenía con su hermano; la misma enfermera no creía que pasase de esa noche.


Estuvo un rato quieta, mirando la lluvia chocar contra la ventana. Un geranio sin flor, que nunca crecería mucho en la oscuridad de aquel patio interior, resistía impasible el insistente chaparrón de marzo. Adela se preguntó porque coño nunca acababa de llegar la primavera a su vida.

Lo de su hermano la había dejado derrotada. Tenía ganas de chillar y correr, de coger un autobús y cruzar los kilómetros que los separaban para pasar con él las últimas horas.

Pero los años habían amordazado su voz y devorado sus rodillas con la artrosis. Y si con la pensión de viudedad apenas le llegaba para mantener iluminado aquel frío piso, mucho menos para costearse un viaje hasta Madrid.

Sentada, lloró gruesas lágrimas de impotencia mientras apretaba los dientes. Se secó la cara con su mano, gordota y cuarteada por la lejía, y se levantó con esfuerzo de la silla.

Mientras caminaba., pasito a pasito, hacia la cocina, pensó que lo mejor era aceptar lo antes posible la nueva situación. Era lo que siempre había hecho. Pero antes tenía a su hermano cuando flaqueaba y se le venía el mundo encima. Siempre lo había tenido, desde niños en la pobre casucha del pueblo.

Cuando se echó de novio a aquel militar que se marchó para no volver, su hermano había estado ahí. Cuando padre la llevó a la curandera para que abortase, su hermano no se separó de ella hasta que se repuso.

Incluso cuando ella se casó con Damián y su hermano se fue con su mujer a Madrid, ellos siguieron juntos: cartas, llamadas, visitas en verano… la ausencia sólo hacía más intenso el reencuentro.

Pero ahora su hermano se había ido para siempre. Ojalá hubiera sido Damian el del cáncer y su hermano el de la aventura con la peluquera. A veces parecía que Dios le quisiera gastar una broma pesada que ella no era capaz de coger.

Al abrir la puerta de esmerilado, Adela notó que le faltaba el aire y que se mareaba. “Los nervios, seguro”, se dijo. Abrió el armarito encima de los fogones y tanteó buscando la caja con las infusiones.

Y en ese instante, simplemente, se desvaneció en el aire.

EJEMPLO PARA COMPARAR: Benito Pérez Galdós. ortunata y Jacinta. Capítulo IX, apartado 2.

Opinión: Me corto las venas. Nunca lo conseguiré (Piteas cae derrumbado sobre el teclado). Vale que me estoy coparando con uno de los gordos, pero es que aspiro a algo mas que guionizar musicales otakus, ostias.


OPINION FINAL: Parece que soy incapaz de hacer una descripción directa sin comenzar a contar la historia. Como si la trama me quemase en las manos o detenerme en un sólo personaje me resultase aburrido.

El no describirlos no me parece necesariamente mal, hay muchos autores a los que admito que van explicando los personajes a lo largo de los cuentos y novelas. Y tambien hay otros tanto que ni siquieran los explican porque no es importante. Y ni entro ne los cuentos, en los que una descripción te roba la intensidad o te machaca la gracia.

Pero lo importante de  esto no es hacerl osiempre y a partir de ahora, sin oque pueda hacerlo cuando lo considere necesario.

¿Moraleja? A leerme Benito Pérez Galdós. De los dos autores es el que más me ha gustado -de lejos- y no me vendrá mal empaparme (por una vez) de un clásico. Ya os contaré